Si quieres encontrar el talento, búscalo bien.
Quizá puede que no haya nada que encontrar.
No todos somos iguales. Y las carencias son parte de nosotros.
Pero si insistes en buscar, el talento no está en la superficie, amigo mío.
Puede estar en el fondo de una guitarra, entre las hojas de un cuaderno, el interior de un piano, sobre un papel en blanco, los músculos de un empeine, la voz de una garganta, sobre las ruedas de una bici, en la pantalla de un ordenador, dentro del mecanismo de una cámara, en la taquigrafía de un guión, tras el rojo del telón...
Muchos buscan y no encuentran.
Si posees alguno, tres, cuatro o incluso siete. No los escondas en las paredes de tu habitación.
La modestia no es una virtud, ni un defecto. La modestia es una mentira.
Siente la vida a través de tus venas. Siente el calor de la inspiración haciendo temblar tus piernas.
Adelante.